La presunción de inocencia.
Uno de los principios básicos del derecho penal
moderno y del derecho constitucional en la medida en que tiene por objetivo
preservar la libertad, es la presunción de inocencia.
La presunción de inocencia significa, para decirlo
de forma sintética, que toda persona debe tenerse por inocente hasta que exista
una sentencia firme de autoridad competente en la que se le tenga como
responsable de la comisión de un delito. A partir de esa presunción se deben
desarrollar una serie de previsiones legislativas para asegurar que mientras la
sentencia condenatoria no exista, se le causen las menores molestias posibles
al inculpado, sobre todo mientras dura el juicio en su contra.
Sobre la presunción de inocencia Luigi Ferrrajoli
apunta que “-si es verdad que los derechos de los ciudadanos están amenazados
no sólo por los delitos sino también por las penas arbitrarias- la presunción
de inocencia no sólo es una garantía de libertad y de verdad,
sino también una garantía de seguridad o si se quiere de defensa
social: de esa ‘seguridad’ específica ofrecida por el estado de derecho y
que se expresa en la confianza de los ciudadanos en la justicia; y de esa
específica ‘defensa’ que se ofrece a éstos frente al arbitrio punitivo”.
El artículo 11 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 dispone en su párrafo primero que “Toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa”. En el mismo sentido, el artículo 14.2. del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos establece que “Toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad conforme a la ley”.
El artículo 11 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 dispone en su párrafo primero que “Toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa”. En el mismo sentido, el artículo 14.2. del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos establece que “Toda persona acusada de un delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad conforme a la ley”.
Textos relevantes para entender la presunción de inocencia:
1) De Jordi Nieva Fenoll.
2) Tesis doctoral sobre el tema.
3) Presunción de inocencia e In dubio pro reo.