Morir en las vacaciones
Morir en las vacaciones. Miguel Carbonell. Los datos son de sobra conocidos: cada año en México se registran unos 4 millones de percances automovilísticos, en los cuales mueren 24 mil personas y otras 40 mil quedan discapacitadas. El 61% de esas muertes ocurre en zonas urbanas y el 39% en carreteras. Ninguna modalidad delictiva ni ningún suceso natural tienen efectos tan devastadores sobre la vida y la integridad física de docenas de miles de mexicanos como los que se producen en nuestras calles y carreteras. Pero se trata de un drama sobre el que se habla muy poco y respecto del cual no parecen estarse tomando las medidas suficientes y necesarias para prevenirlo. Nada justifica que en pleno siglo XXI salir a la carretera siga implicando un altísimo riesgo para las familias mexicanas. No se explica que siga habiendo tanta laxitud de las autoridades al momento de regular los vehículos que se utilizan para transportar personas y respecto de la supervisión del estado en el